· Enrique Fernández Osorio · Tutorials · 5 min read
La Oralidad en el Proceso Civil Panameño: Un Camino hacia la Justicia Moderna
La oralidad puede hacer la justicia civil panameña más rápida, transparente y comprensible, reduciendo formalismos y dilaciones del sistema escritural.

El proceso civil en Panamá ha estado históricamente marcado por procedimientos escritos, caracterizados por su formalismo y extensos trámites burocráticos. Esta herencia ha configurado un sistema judicial civil que, en muchas ocasiones, resulta lento, complejo y poco accesible para la mayoría de los ciudadanos. Ante estas dificultades, se ha planteado con creciente urgencia la necesidad de incorporar la oralidad como eje fundamental del proceso civil. Si bien existe un Proyecto de Ley para un Nuevo Código Procesal Civil que busca esta transformación, es importante entender que esta reforma está en desarrollo y consolidación, reflejando un esfuerzo continuo por modernizar la administración de justicia. La adopción de la oralidad no solo modernizaría nuestro sistema, sino que también lo haría más eficiente, transparente y comprensible para quienes buscan resolver sus conflictos.
1. Limitaciones del sistema actual
En el sistema actual, el proceso civil se lleva a cabo, en su mayor parte, a través de escritos. Los abogados presentan documentos, los jueces los revisan y la comunicación entre las partes ocurre en un lenguaje técnico y formal que muchas veces aleja al ciudadano común. Este método, aunque detallado, tiene varias limitaciones:
Excesiva lentitud
La acumulación de escritos, pruebas documentales y notificaciones formales ralentiza el proceso. Esto lleva a que, en ocasiones, los juicios civiles se extiendan durante años, afectando la pronta resolución de los conflictos y generando frustración en las partes. La jurisprudencia panameña ha reconocido que la transición a la oralidad busca precisamente reducir las dilaciones implícitas en el sistema escritural (Sentencia de Pleno, 23/12/2022, exp. E973972022-08-08-12-05-Se-Se-Rj0008-15582023).
Distancia entre el juez y las partes (falta de inmediación)
La dependencia de documentos escritos limita la inmediación del juez con las partes, los abogados y las pruebas. El juez pierde la oportunidad de interactuar directamente con las personas involucradas y de evaluar sus testimonios de forma personal, lo que puede afectar la calidad y la percepción de justicia de las decisiones.
Dificultad de acceso
La excesiva formalidad y tecnicismo del proceso escrito crean una barrera para las personas que no cuentan con conocimientos legales, haciendo que la justicia civil se perciba como algo distante, complicado y, en ocasiones, inaccesible.
2. Ventajas de la oralidad en el proceso civil
La implementación de la oralidad en el proceso civil panameño promete beneficios sustanciales, alineados con los principios de un Estado de Derecho moderno y eficiente:
Inmediación y transparencia
La oralidad establece un contacto directo entre el juez y las partes. En audiencias orales, el juez puede escuchar directamente los argumentos, las pruebas y los testimonios, facilitando una mejor comprensión de los hechos y la valoración de la veracidad de los testigos (Sentencia de Pleno, 07/08/2023, exp. E284792023-08-08-12-05-Pr-Se-Rj0007-78082023).
La transparencia se fortalece porque la audiencia se desarrolla en un entorno público y accesible, donde todas las actuaciones son visibles, lo que garantiza el derecho a un juicio justo y fomenta la confianza en la justicia.
Celeridad y eficiencia
A diferencia del proceso escritural, la oralidad permite concentrar etapas del juicio en uno o pocos actos procesales. Pruebas, argumentos y decisiones se presentan y valoran con menor dilación. La exposición de motivos del Proyecto de Ley para el Nuevo Código Procesal Civil resalta que la oralidad contribuye a reducir plazos, eliminar trámites innecesarios y simplificar el proceso. Esto se traduce en respuestas en tiempos razonables y en una reducción de formalidades legales, con un ejercicio más efectivo del derecho de defensa (véase también Sentencia de Pleno, 07/08/2023, exp. citado).
Comprensibilidad y participación activa
La audiencia oral permite a las partes escuchar directamente los argumentos de los abogados, las preguntas del juez y las respuestas de los testigos. El proceso se hace más claro y accesible. Además, la participación activa en un entorno oral fortalece el derecho de defensa al posibilitar réplicas y contraargumentos inmediatos.
Mejora en la toma de decisiones
El contacto directo del juez con pruebas y testimonios en audiencias orales permite una valoración probatoria más precisa. Diversas propuestas regionales (p. ej., bases para un código modelo civil para Latinoamérica) subrayan la importancia de esta inmediación para decisiones más justas y acordes con las circunstancias del caso.
3. Propuestas y bases para la oralidad en Panamá
El Proyecto de Ley para el Nuevo Código Procesal Civil coincide en que la oralidad debe ser el núcleo del proceso civil moderno. Propone desarrollar las etapas del juicio en audiencias orales, con un juez activo que oriente y dirija el proceso hacia una resolución justa y rápida.
Estas propuestas buscan que la oralidad:
- Reduzca los tiempos procesales, evitando extensos intercambios de escritos y notificaciones.
- Promueva la transparencia y la participación activa de las partes.
- Permita al juez valorar pruebas en su contexto para decisiones más fundamentadas.
4. Impacto en los actores del proceso
Jueces
Evolucionan de ser revisores de expedientes a directores activos de audiencia: conducen el debate, gestionan el tiempo, resuelven incidencias in situ y valoran pruebas de forma directa.
Abogados
Deben potenciar habilidades de litigación oral, argumentación concisa y manejo estratégico de la prueba en tiempo real. La preparación de casos se centra más en oratoria y persuasión que en la redacción exhaustiva.
Ciudadanos/partes
Se benefician de un proceso más transparente y comprensible. Pueden interactuar con el juez, observar el desarrollo de la prueba y entender mejor las decisiones, fortaleciendo la confianza en el sistema.
5. Conclusión
La adopción de la oralidad en el proceso civil panameño es esencial para modernizar y mejorar la administración de justicia. Aporta celeridad, inmediación, transparencia y accesibilidad. Al colocar las audiencias en el centro, se acerca la justicia a las personas, se reduce la formalidad excesiva y mejora la calidad de las decisiones.
Si bien la transición presenta desafíos, la oralidad se perfila como la vía necesaria y urgente para construir una justicia más cercana, rápida y justa para todos los ciudadanos panameños.
—
Enrique Fernández Osorio
Socio Fundador